El pasado 9 de mayo fuimos a Burgos. Tras un viaje de dos horas, llegamos al monasterio de San Pedro de Cardeña, y allí, de la mano de un monje benedictino, pudimos visitar el monasterio. Pudimos disfrutamos mucho de las historias que nos contó, y además pudimos disfrutar de sus magníficas obras de arte.
Después, a 11Km en autobús, llegamos al centro de la ciudad de Burgos. Cruzamos el puente sobre el río Ebro y llegamos a la catedral. Nos encontramos con un edificio gótico maravilloso. Allí pudimos contrastar un montón de cosas que previamente habíamos estudiado en clase de historia. Verdaderamente ha merecido conocer un edificio de tanta importancia histórica.